No es un misterio para nadie, ni una novedad que Horizon: Zero Dawn es uno de los juegos del año, en un año 2017 que estando solo en marzo ya se encargó de completar quizás cinco de los puestos de muchos top 10 de la gente. Con un puntaje en Metacritic (en este momento al menos) de 89 es uno de los títulos que fue más esperados y a la vez una sorpresa, ya que Guerrilla Games, desarrolladores del juego crearon una nueva propiedad intelectual en una época donde es más rentable simplemente poner un numero al final de un nombre ya conocido e ir a lo seguro.
En este mismo sitio contamos con una excelente review que lo califica como un título imperdible, pero aun asi yo estoy decepcionado con el y al escribir estas palabras no quiero caer en el lugar común, y en el que más de uno me estara encasillando, de “pff, dice que no le gusta para llevar la contra”, pero el problema principal no es que no me haya gustado, sino que veo tantas cosas que me gustan del juego que no puedo evitar pensar “¿Por que no mas?” “¿Por que no mejor?”.
Horizon nos sitúa en mundo que se encuentra en medio de un renacimiento, algunos lugares lo definieron post apocalíptico, pero para mi nada está más alejado de la realidad, se encuentran muchas nuevas civilizaciones, costumbres, pueblos, creencias. Nuestro propio pueblo, los Nora, son una civilización arraigada a “antiguas” costumbres y cazadores, y a pesar de esto luego de mis más de 40 horas de juego siento que no se mucho de ellos, un matriarcado que realmente no sabemos en qué consiste, o cómo es formado y en el costado argumental los tiempos están mal manejados, o mejor dicho la historia maneja tus tiempos, siendo que recibís la información dependiendo si tu situación en la historia es la adecuada para seguir adelante, haciendo aun cuando la historia sea buena, que estando a mitad de la campaña ya sabemos cómo van a terminar las cosas.
Esto me decepciona ya que siento que todo el esfuerzo que se enfocó en crear a Alloy, la protagonista, un personaje excelente que empieza como una niña y va creciendo no solo en edad sino como persona, desarrollado un carácter, una actitud, se pierde al ver como el resto de los personajes no cuentan con historias interesante, somos el mejor personaje en este mundo y muy pocos de los personajes secundarios motivaban a conocer sus historias.
Esto me lleva al otro punto que hizo que este juego excepcional desde el lado técnico y jugable (a pesar de que no me guste muchas de las mecánicas comunes de mundo abierto en los que cae) pero el mundo se sentía vacío, a pesar de ser parte de una comunidad de cazadores y guerreros nunca estuve recorriendo una planicie y vi gente de mi pueblo peleando con un dinosaurio robótico que me motivaba a unirme a la pelea. ese es uno de los ejemplos que suelen suceder en otros mundos abiertos, donde aprovechan su creación para además de tener una arena donde el jugador tenga su aventura, también pueda contar su propia experiencia, hablar con un amigo y te diga “estaba saliendo de una cueva y de repente pasó un Thunderjaw con tres cazadores atrás y no entendía nada!”, cosa que no pasa, todo el mundo está “guionado” sabemos que hay que cada sector con solo ver un icono en el mapa.
Las misiones secundarias me hicieron lo mismo, siento que era una oportunidad para explorar un poco más a la persona común que vive en ese mundo, distintas tribus y su gente, pero no… Generalmente son tareas aburridas que hacemos más de una vez y no proporcionan mucho, al punto que sobre el final de la campaña ya no tenia interes en ellas.
Una de las situaciones fue que durante una misión, una mujer, en una cinemática, me nombra a un personaje que estaba sentenciado a muerte y me dice “Sé que te preocupa y no vas a dejar que muera” … La verdad que no, no se ni de quién me estas hablando…
Después de todo lo que escribí parecería que simplemente estoy haciendo una review negativa del juego, pero no es así, dentro del juego se encuentran un montón de cosas que valen la pena descubrir la historia, aun cuando siento que los tiempo no estén manejados correctamente, cuenta la vida de Alloy de una manera que vale la pena experimentar, al final sentí que creció como persona, que tenía una personalidad y no era solo un avatar nuestro, crea un mundo lleno de misterios y enemigos que hacen los combates divertidos y diversos.
Horizon: Zero Dawn es impecable desde muchos aspectos, pero podría haber sido tanto más, si tan solo el mundo que nos rodea estuviera tan vivos como nuestro personaje y realmente tengo la esperanza que en la inevitable secuela no solo Alloy me motive a seguir adelante sino que conocer a la gente que convive con nosotros sea una aventura en sí misma.
